Los días 19 y 20 de octubre, Profonanpe realizó la segunda edición de Mesas Temáticas, en las que se discutió sobre 4 temas relevantes: la conservación de ecosistemas para el desarrollo sostenible, la gobernanza territorial para la conservación, el manejo ambiental y las poblaciones indígenas u originarias, y las cadenas sostenibles para el desarrollo.
En esta edición, más de 30 participantes del sector público y privado presentaron diversas propuestas y acciones que se encuentran llevando a cabo desde sus áreas de trabajo y cómo estas han avanzado para combatir problemáticas asociadas a la deforestación de Áreas Naturales Protegidas, a la reducción de la biodiversidad y la gestión de ecosistemas. Se enfatizó que el país ha construido un sistema de áreas protegidas exitoso basado en una adecuada planificación, administración central y financiamiento .Sin embargo, la conservación fuera de estos espacios presenta retos debido a una normatividad incompleta, falta de conocimiento científico y de gestión basado en la experiencia y a una débil articulación de los actores.
Durante el encuentro, se contó con la participación de Rodrigo Botero, director del Fondo de Conservación y Desarrollo Sostenible de Colombia, como invitado internacional, quien compartió los retos de la deforestación y las actividades ilícitas en las áreas protegidas de su país. Durante su ponencia resaltó que “las fronteras de Colombia con Venezuela, Brasil y Perú, están tapadas con dragas de minería ilegal que avanzan contra la gobernanza de los territorios”. Por otro lado, los esfuerzos de nuestro país en construir una gobernanza adecuada de los territorios no solo pasa por seguir desarrollando los pilares del ordenamiento territorial, sino que además requiere que el aprovechamiento sostenible de los recursos esté sustentado en una trazabilidad que, muchas veces, tiene que ser transfronteriza.
Asimismo, se enfatizó el rol de los pobladores locales, especialmente de los pueblos indígenas, como agentes de conservación. Su mirada integral del territorio y el uso de recursos, que hacen asociados a prácticas culturales que buscan el cuidado y respeto de los ecosistemas, permiten mantener el equilibrio ecológico que hemos perdido en otras áreas del país. Fermín Chimatani, presidente de ANECAP, sostuvo que “los beneficios de la conservación se dan a nivel internacional, nacional y local pero los costos son pagados mayormente por las poblaciones locales, en especial por los pueblos indígenas que viven en el territorio. Hemos pasado de la protesta a la propuesta y a la acción”. Al respecto, todavía queda un largo camino por recorrer para que la participación de las poblaciones indígenas sea pareja y constante, y protagonista en la toma de decisiones sobre el territorio que habitan.
El nuevo enfoque de la conservación promueve el uso sostenible de los recursos para generar procesos de desarrollo sostenible que beneficien a las poblaciones locales en el que el fomento de cadenas de valor es una estrategia central. El reto principal es generar las condiciones habilitantes para que estas cadenas florezcan que pasan por mejorar la provisión de infraestructura y servicios técnicos, la provisión de servicios financieros, por incentivar la formalización y promover capacidades, entre otros. El Grupo AJE señaló que las cadenas sostenibles son la base para dejar el modelo de producción que nos dejó la revolución industrial y adentrarnos y retomar la revolución natural. Después de todo, como señaló Dennis del Castillo del IIAP, la Amazonía cambió el mundo al brindarnos productos como el caucho, el cacao y la quinina.
Esta segunda edición de Mesas temáticas nos ha dejado muchas experiencias y nuevas oportunidades para el diseño de estrategias y propuestas que nos ayuden a cuidar, gestionar y aprovechar nuestros ecosistemas para lograr el desarrollo sostenible del país.