Entre los principales hitos destacan la expansión de la plataforma Huella de Carbono Perú, el desarrollo de la herramienta AdaptAcción y la nueva Contribución Nacionalmente Determinada (NDC 3.0), que incorpora un enfoque de justicia climática.
Estos esfuerzos reflejan un trabajo sostenido en el que convergen Estado, sector privado, pueblos indígenas, cooperación internacional y ciudadanía. Más que una agenda técnica, se trata de una apuesta por fortalecer la resiliencia del país frente a un escenario climático cada vez más desafiante.
En los últimos años, Perú ha logrado avances significativos. Actualmente, el 41% de las medidas de mitigación y el 50% de las medidas de adaptación se encuentran en ejecución. Gracias a estas acciones, se han logrado almacenar más de 27 millones de metros cúbicos de agua a través de la cosecha de agua en distintas regiones del país, beneficiando a cerca de tres millones de personas. Estas cifras muestran que la acción climática, cuando se articula de forma efectiva, genera impactos tangibles en los territorios.
Una pieza clave de esta estrategia es el financiamiento climático. El país ha diseñado mecanismos para canalizar recursos provenientes de fondos públicos, cooperación internacional y empresas privadas. En esta línea, destacan instrumentos como el Global Environment Facility (GEF, por sus siglas en inglés), el Green Climate Fund (GCF, por sus siglas en inglés) y el nuevo fondo de pérdidas y daños que entrará en operación en 2026.
Como resultado de este trabajo, recientemente se aprobó un proyecto de ganadería regenerativa por 14 millones de dólares, que se implementará en Cusco y Cajamarca a partir de 2026. Este se suma a iniciativas como Puna Resiliente, actualmente en marcha en la sierra sur.
El sector privado también viene consolidando su rol como aliado estratégico en la acción climática. Más de 2,500 organizaciones participan hoy en Huella de Carbono Perú impulsada por el Ministerio del Ambiente (MINAM) y la mitad de las empresas adheridas al Pacto Global de las Naciones Unidas ya han medido su huella de carbono. Gremios como ASOCEM están incorporando energías renovables y procesos más sostenibles en sus operaciones, reforzando así el compromiso empresarial con la reducción de emisiones y la adaptación al cambio climático.
En el episodio de Capital Natural, se reflexiona sobre los esfuerzos que marcan el compromiso del país con un desarrollo sostenible y bajo en emisiones
En este contexto, la ex directora general de Cambio Climático del MINAM, Berioska Quispe participó en el podcast Capital Natural para reflexionar sobre el camino recorrido por el país.
Durante la entrevista, destacó que “el cambio climático es tarea de todos” y subrayó la importancia de sumar esfuerzos desde distintos sectores para avanzar hacia un modelo de desarrollo más sostenible. Durante la COP 30, la delegación peruana presentará la Estrategia Nacional frente al Cambio Climático al 2050, el Registro Nacional de Medidas de Mitigación, los avances de Huella de Carbono Perú y la NDC 3.0. Además, se anunciará un nuevo decreto supremo sobre medidas de adaptación y mitigación y la renovación de la Declaración Conjunta de Intención Perú-Noruega-Alemania, que ha permitido conservar 6,3 millones de hectáreas de bosques.
La participación de Perú en esta cumbre representa una oportunidad para consolidar alianzas, movilizar financiamiento y amplificar la voz del país frente a una crisis global que no admite demoras. El cambio climático no es un fenómeno lejano: impacta directamente en la seguridad hídrica, alimentaria y económica de millones de peruanos. Frente a este escenario, cada acción (desde conservar bosques hasta transformar hábitos de consumo) cuenta.
Esta entrevista se dio en el marco del podcast Capital Natural, iniciativa liderada por Profonanpe y que puede ser escuchada en YouTube y Spotify. Puedes verlo en este link.